En Bélgica hay tres idiomas oficiales, en Suiza cinco, y en Finlandia dos. Esto si solo hablamos de Europa e ignoramos otros continentes.
Volando encima del atlántico y llegando a Perú, aquí, solo en nuestro país existen 48 idiomas reconocidos por el gobierno.
Sí señores, 48.
De estos 48, los más hablados son solo tres: el castellano, el quechua, y el aymara.
Un 80% de la población habla castellano.
Como hispanohablantes, ¿realmente debemos aprender el resto de 47 idiomas para «ser más peruanos»?
Constantemente conozco personas de distintos ámbitos que se avergüenzan de no hablar quechua o aymara. Su argumento es el siguiente: «si somos peruanos, deberíamos saber uno de nuestros idiomas».
¿Acaso el castellano no es nuestro desde hace más de 400 años?
Os ruego que no malentendáis. Yo apoyo fervientemente la idea de que el quechua y el aymara sean no solo enseñados, pero que las clases de colegio sean dictadas en esos idiomas, sobretodo en las zonas del país donde es la lengua vernacular.
Velasco tomó una de las mejores decisiones al reivindicar a idiomas que desde la independencia han sido despreciados sistemáticamente, no solo por muchos hispanohablantes, pero también por el estado mismo.
Sin embargo, yo no voy a aprender quechua por la estúpida razón de «ser más peruano».
No es la primera vez que lo digo pero el quechua NO ES UN IDIOMA PERUANO.
Es un idioma hablado en el territorio del Perú y que está enterrado firmemente en nuestra cultura, además de originarse en el territorio que hoy sería Perú. Pero el idioma en sí, se habla en varios países de Sudamérica. Por lo que si siguiésemos la línea argumental de que hablar quechua te hiciese «más peruano» entonces encontraríamos a muchos compatriotas más allá del lago Titicaca y más allá de Tumbes.
Sí cierto, el quechua se originó en los territorios de lo que hoy sería Perú. Pero no se originó en Perú. ¿Confundidos?
Déjadme explicaros.
Una cosa es el estado peruano que surgió en 1821 y otra cosa es el Imperio Incaico que acabó en el siglo XVI. Son dos cosas diametralmente y completamente distintas.
El estado peruano se fundó en valores y cultura española. De ninguna manera fue una continuación del Imperio Incaico.
Cuando Don José de San Martín proclamó la independencia, ya existía el quechua, por lo tanto la República del Perú heredó dos idiomas importantes de dos Imperios distintos, del Inca y del Español.
Raramente los idiomas, y con ello su población hablante, que tiene una cultura y una historia común, conviven únicamente entre sí, sin la influencia de otros.
Hay casos excepcionales como el aislamiento de los islandeses y los japoneses.
Pero en la mayoría de casos, bajo el techo de un gobierno o estado usualmente se encuentran personas de distintos idiomas e identidades.
Perú no es la excepción.
El quechua en otras palabras es solo un idioma más de nuestro tesoro lingüístico. No EL idioma peruano por excelencia.
Así que si uno no habla quechua o aymara, no significa que sea menos peruano que otro que sí los hable.
Por eso es que digo que el razonamiento de «aprende quechua para ser más peruano» me parece absurdo.
¿Entonces un Belga que solo habla francés, es «más belga» que uno que solo hable neerlandés y alemán?
¿Qué me dicen de una chica suiza que solo hable italiano y francés pero nada de alemán ni de alemán suizo?
O sea, ¿entonces que el 80% de peruanos son solo «un tercio peruanos» porque les falta aprender quechua y aymara para ser completos? ¡Oh, me olvidé!, ¿qué hay de los otros 45 idiomas restantes?
El estado peruano no es solo para los hispanohablantes. Me extraña que para el siglo XXI no haya publicidad ni señalización pública en quechua, sobre todo en las zonas donde hay más hablantes.
Sin embargo aludir a una necesidad de aprender quechua o aymara para «ser más peruanos» me parece descabellado.
Escrito por Raúl «Radwulf» Valero Chavez
20/03/2018